“Decimos que un ser es conforme a su naturaleza cuando alcanza su completo desarrollo, este es su fin y destino, es además, el primer bien para ellos, y bastarse a sí mismos es su mayor felicidad”.
Aristóteles, La política.
La posible solución a todos estos problemas se debe iniciar con un plan de nación orientado a conseguir el bienestar de todos los ciudadanos dominicanos a través de conseguir autosuficiencia del país en temas relacionados a: energía, educación, alimentación, vivienda, salud, y empleo. El objetivo primario debe ser llevar a toda la población a un estatus social mínimo de clase media baja (en su primera etapa), eliminando la pobreza. Para ello debemos entender cuáles son las características que tiene una familia de clase media baja y cuáles son sus requerimientos mínimos de servicios.
· En una familia de clase media baja cada persona debe:
o Alimentarse con un mínimo de 2700 calorías/día.
o Ingresos de RD$35,000.00/familia de 4 persona (2 padres y 2 hijos)
o Tener una vivienda que tenga un mínimo de 15 metros cuadrados/persona. En un lugar seguro a delincuencia y a fenómenos naturales., con acceso a empleo, centros comerciales, etc. cerca de la casa y a líneas de transporte.
o Con disponibilidad de servicios de agua (5 metros cúbicos/mes).
o Con disponibilidad de servicios de energía (150 kw/mes).
o Acceso a educación adecuada para sus hijos (eliminar el analfabetismo).
o Salud.
o Teléfono, televisión por cable, internet y gas.
o Calles iluminadas, contenes y aceras limpias.
o Seguridad (eliminación de la delincuencia).
o Poder costear ropa, uniformes, transporte, etc.
o Poder ahorrar un mínimo de 10% de sus ingresos.
o Poder entretenerse con un mínimo de 5% de sus ingresos.
La siguiente pregunta es clave: ¿Podría la República Dominicana generar toda esta riqueza, para luego poder repartirla entre todos sus ciudadanos? Mi respuesta en este momento sería; no, no puede. No puede haciendo las cosas como la está haciendo. Debe existir un cambio, radical. Una reingeniería.
La República Dominicana debe “Repensar los fundamentos y rediseñar radicalmente los procesos de la empresa (el país) con la intensión de conseguir mejoras dramáticas”. Debe hacer reingeniería y debe poner a hacerla a un líder que sea capaz, justo, honrado y que esté dispuesto a guiar al país.
Obviamente los primeros pasos deberían ser orientados a rebajar la cantidad de bienes, insumos y servicios que adquirimos del extranjero y sustituirlos por contrapartes de generación eficiente y local. El otro paso, desarrollar medios de generación de divisas que sean menos dependientes de factores externos y de mayor control local como podrían ser la industria y el agro a diferencia del turismo, zonas francas y remesas que podrían representar entradas que hoy pueden estar pero mañana no se sabe.
Antes que todo, debemos saber la cantidad exacta de personas que debemos satisfacer con todos los bienes y servicios que vamos a generar, pero para contestar esta pregunta primero debemos saber qué cantidad de bienes y servicios podemos desarrollar en un marco de tiempo no mayor 20 a años, con la idea de ser autosuficientes. La pregunta se invierte, ya no es, ¿cuántos bienes debemos generar para poder suplir a la población?, esto es lo que hemos tratado de hacer y ha sido imposible mientras nuestra población sigue creciendo, la pregunta es, ¿cuántos bienes podemos generar desarrollando adecuadamente nuestra economía, explotando los recursos locales?, y luego preguntar, ¿y esto? ¿Para cuántas personas alcanza? (de clase media baja).
¿Por dónde comenzar?, muchos de los puntos que se presentan en la lista de requisitos mínimos de una familia clase media baja son posibles de conseguir en la República Dominicana explotando sus propios recursos naturales, explotando nuestro deseo de mejorar y nuestra inteligencia, pero hay uno en especifico que constituye un tema mundial y que para nosotros ha sido, es y seguirá siendo nuestro principal problema como país autosuficiente y es, la generación de energía eléctrica y generación de combustibles para el transporte. El suministro de petróleo.
Para poder seguir adelante es necesario entender un poco más sobre la situación mundial actual del petróleo. El sitio, International Energy Agency presenta cifras oficiales sobre la existencia/reservas mundiales de petróleo. Según el consumo actual de petróleo a nivel mundial, quedan reservas para 35 años de consumo. En su libro “Hitler ganó la guerra” Walter Graziano estima que las reservas petroleras de Inglaterra no llegarán al 2007, las Estados Unidos no llegarán al 2010, y luego irán secando paulatinamente los pozos de Rusia y México, de ahí que en poco tiempo el 70% del petróleo estará ubicado en el golfo pérsico (en Arabia Saudita, Irak, Irán, Emiratos Árabes Unidos y Kwait), otro 10% en otros países musulmanes (Libia, Nigeria e indonesia).
Viendo esta situación la producción mundial de petróleo está a punto de tocar techo, esto es que, la velocidad de extracción empezará a reducirse en el momento en que los pozos existentes se vayan secando y que la velocidad de descubrimiento de nuevos pozos vaya mermando. Según cálculos de geólogos y expertos, un escenario pesimista espera que se llegue a ese techo en el año 2010, escenarios optimistas esperan que esto suceda entre los años 2014 y 2018, ningún escenario sobrepasa el año 2020. En ese momento se va a evidenciar una serie consecutiva de bruscas escaseces de petróleo. A partir de ese momento, año tras año, habrá cada vez menos petróleo disponible para alimentar cada vez más habitantes de la Tierra y a economías que pugnarán por seguir creciendo por encima del 2% anual. Sin duda alguna habrá guerras, de hecho, todos sabemos que el único motivo de las guerras de Irak-USA a principios de los 90´s y de los 00´s fueron motivadas por el control de petróleo (tanto en Kwait como en Irak). Graziano insinua que las torres gemelas fueron derrumbadas por los mismos estados unidos para justificar una guerra en el golfo.
Viendo todos esto, de esta manera, el planeta se encuentra frente a una disyuntiva que debe solucionarse por alguna de estas tres vías (o una combinación de entre ellas): 1) Una importante reducción en la tasa de crecimiento demográfico a escala global y presumiblemente una declinación de la cantidad de habitantes de la Tierra; 2)Una muy profunda recesión a escala global que produzca una reducción apreciable en el nivel de vida de la población global; 3) el abandono gradual pero acelerado de la tecnología del petróleo.
En Republica Dominicana, reconociendo nuestra gran dependencia internacional de este recurso pienso que debemos orientar todos los esfuerzos a minimizar esta dependencia en este punto específico. Reducir a su mínima expresión esta dependencia debería ser nuestro objetivo económico reconocido y prioritario, al cual debemos abrir el amplio frente de batalla. ¡Aquí comienzan las decisiones radicales!
En este sentido, dada la importancia que tiene este tema y que por lo visto seguirá teniendo en los próximos años, pienso que debemos reconocer el tema energético como el punto de control de todas las actividades económicas y sociales que trataremos.
Aristóteles, La política.
La posible solución a todos estos problemas se debe iniciar con un plan de nación orientado a conseguir el bienestar de todos los ciudadanos dominicanos a través de conseguir autosuficiencia del país en temas relacionados a: energía, educación, alimentación, vivienda, salud, y empleo. El objetivo primario debe ser llevar a toda la población a un estatus social mínimo de clase media baja (en su primera etapa), eliminando la pobreza. Para ello debemos entender cuáles son las características que tiene una familia de clase media baja y cuáles son sus requerimientos mínimos de servicios.
· En una familia de clase media baja cada persona debe:
o Alimentarse con un mínimo de 2700 calorías/día.
o Ingresos de RD$35,000.00/familia de 4 persona (2 padres y 2 hijos)
o Tener una vivienda que tenga un mínimo de 15 metros cuadrados/persona. En un lugar seguro a delincuencia y a fenómenos naturales., con acceso a empleo, centros comerciales, etc. cerca de la casa y a líneas de transporte.
o Con disponibilidad de servicios de agua (5 metros cúbicos/mes).
o Con disponibilidad de servicios de energía (150 kw/mes).
o Acceso a educación adecuada para sus hijos (eliminar el analfabetismo).
o Salud.
o Teléfono, televisión por cable, internet y gas.
o Calles iluminadas, contenes y aceras limpias.
o Seguridad (eliminación de la delincuencia).
o Poder costear ropa, uniformes, transporte, etc.
o Poder ahorrar un mínimo de 10% de sus ingresos.
o Poder entretenerse con un mínimo de 5% de sus ingresos.
La siguiente pregunta es clave: ¿Podría la República Dominicana generar toda esta riqueza, para luego poder repartirla entre todos sus ciudadanos? Mi respuesta en este momento sería; no, no puede. No puede haciendo las cosas como la está haciendo. Debe existir un cambio, radical. Una reingeniería.
La República Dominicana debe “Repensar los fundamentos y rediseñar radicalmente los procesos de la empresa (el país) con la intensión de conseguir mejoras dramáticas”. Debe hacer reingeniería y debe poner a hacerla a un líder que sea capaz, justo, honrado y que esté dispuesto a guiar al país.
Obviamente los primeros pasos deberían ser orientados a rebajar la cantidad de bienes, insumos y servicios que adquirimos del extranjero y sustituirlos por contrapartes de generación eficiente y local. El otro paso, desarrollar medios de generación de divisas que sean menos dependientes de factores externos y de mayor control local como podrían ser la industria y el agro a diferencia del turismo, zonas francas y remesas que podrían representar entradas que hoy pueden estar pero mañana no se sabe.
Antes que todo, debemos saber la cantidad exacta de personas que debemos satisfacer con todos los bienes y servicios que vamos a generar, pero para contestar esta pregunta primero debemos saber qué cantidad de bienes y servicios podemos desarrollar en un marco de tiempo no mayor 20 a años, con la idea de ser autosuficientes. La pregunta se invierte, ya no es, ¿cuántos bienes debemos generar para poder suplir a la población?, esto es lo que hemos tratado de hacer y ha sido imposible mientras nuestra población sigue creciendo, la pregunta es, ¿cuántos bienes podemos generar desarrollando adecuadamente nuestra economía, explotando los recursos locales?, y luego preguntar, ¿y esto? ¿Para cuántas personas alcanza? (de clase media baja).
¿Por dónde comenzar?, muchos de los puntos que se presentan en la lista de requisitos mínimos de una familia clase media baja son posibles de conseguir en la República Dominicana explotando sus propios recursos naturales, explotando nuestro deseo de mejorar y nuestra inteligencia, pero hay uno en especifico que constituye un tema mundial y que para nosotros ha sido, es y seguirá siendo nuestro principal problema como país autosuficiente y es, la generación de energía eléctrica y generación de combustibles para el transporte. El suministro de petróleo.
Para poder seguir adelante es necesario entender un poco más sobre la situación mundial actual del petróleo. El sitio, International Energy Agency presenta cifras oficiales sobre la existencia/reservas mundiales de petróleo. Según el consumo actual de petróleo a nivel mundial, quedan reservas para 35 años de consumo. En su libro “Hitler ganó la guerra” Walter Graziano estima que las reservas petroleras de Inglaterra no llegarán al 2007, las Estados Unidos no llegarán al 2010, y luego irán secando paulatinamente los pozos de Rusia y México, de ahí que en poco tiempo el 70% del petróleo estará ubicado en el golfo pérsico (en Arabia Saudita, Irak, Irán, Emiratos Árabes Unidos y Kwait), otro 10% en otros países musulmanes (Libia, Nigeria e indonesia).
Viendo esta situación la producción mundial de petróleo está a punto de tocar techo, esto es que, la velocidad de extracción empezará a reducirse en el momento en que los pozos existentes se vayan secando y que la velocidad de descubrimiento de nuevos pozos vaya mermando. Según cálculos de geólogos y expertos, un escenario pesimista espera que se llegue a ese techo en el año 2010, escenarios optimistas esperan que esto suceda entre los años 2014 y 2018, ningún escenario sobrepasa el año 2020. En ese momento se va a evidenciar una serie consecutiva de bruscas escaseces de petróleo. A partir de ese momento, año tras año, habrá cada vez menos petróleo disponible para alimentar cada vez más habitantes de la Tierra y a economías que pugnarán por seguir creciendo por encima del 2% anual. Sin duda alguna habrá guerras, de hecho, todos sabemos que el único motivo de las guerras de Irak-USA a principios de los 90´s y de los 00´s fueron motivadas por el control de petróleo (tanto en Kwait como en Irak). Graziano insinua que las torres gemelas fueron derrumbadas por los mismos estados unidos para justificar una guerra en el golfo.
Viendo todos esto, de esta manera, el planeta se encuentra frente a una disyuntiva que debe solucionarse por alguna de estas tres vías (o una combinación de entre ellas): 1) Una importante reducción en la tasa de crecimiento demográfico a escala global y presumiblemente una declinación de la cantidad de habitantes de la Tierra; 2)Una muy profunda recesión a escala global que produzca una reducción apreciable en el nivel de vida de la población global; 3) el abandono gradual pero acelerado de la tecnología del petróleo.
En Republica Dominicana, reconociendo nuestra gran dependencia internacional de este recurso pienso que debemos orientar todos los esfuerzos a minimizar esta dependencia en este punto específico. Reducir a su mínima expresión esta dependencia debería ser nuestro objetivo económico reconocido y prioritario, al cual debemos abrir el amplio frente de batalla. ¡Aquí comienzan las decisiones radicales!
En este sentido, dada la importancia que tiene este tema y que por lo visto seguirá teniendo en los próximos años, pienso que debemos reconocer el tema energético como el punto de control de todas las actividades económicas y sociales que trataremos.
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